domingo, 30 de marzo de 2014

Violencia

Violencia es convivir con una tasa de paro del 27%.

Violencia es que los jubilados tengan que abandonar su medicación porque con su pensión de 400 euros tienen que ayudar a sus hijos, parados de larga duración en muchos casos, a hacer la compra.

Violencia es vivir en un país en el que se ejecutan una media de 184 desahucios al día.

Violencia es que los sueldos de los directivos españoles sean de los más altos de la UE mientras el poder adquisitivo del trabajador medio no deja de caer.

Violencia es tener el honor de ser el segundo país europeo con mayor índice de pobreza infantil por detrás de Rumania.

Violencia es asistir a diario al lamentable espectáculo de la corrupción.

Violencia es ver a cada vez más personas hurgando en los cubos de basura.

Violencia es que la gente vaya a trabajar cada mañana con el miedo a que le puedan poner en la calle en cualquier momento.

Violencia es intentar criminalizar cualquier protesta en nombre de la ¿democracia? para silenciar a millones de ciudadanos descontentos.

Violencia es obligarnos a pagar autopistas sin coches, aeropuertos sin aviones, y demás florituras innecesarias promovidas en su día por el político de turno para que sus amigos ganaran un dinerito.

Violencia es que te mientan a diario.

Violencia son las pelotas de goma y las concertinas de Melilla.

Violencia es querer convertir en rentables servicios básicos como la sanidad y la educación...

Eso, también es violencia.


domingo, 23 de marzo de 2014

Mónica Francisca la Antisistema-Radical de izquierdas-Neonazi-Comunista-simpatizante de Amanecer Dorado-Estalinista-Fascista-Anti demócrata-Marxista- y Puta. Sobre todo, muy puta.



Ayer estuve en la manifestación convocada por las Marchas de la Dignidad en Madrid y me emocioné.

Me emocionó el ambiente, me emocionó el hecho de ver a tantísima gente en la calle y me emocionó que la convocatoria superase todas mis expectativas.

Allí me encontré con amigos que militan en Izquierda Unida, con otros que votan al PSOE, con alguno del PP e incluso con una pareja maravillosa (católica y practicante) a la que he tenido la suerte de conocer a través de una fundación religiosa creada nada más y nada menos que por un obispo. O sea, muy de izquierda radical todo, empezando por una servidora que de vez en cuando hasta se echa un Padre Nuestro...

Pues bien, después de llegar a casa y ver los telediarios, y de levantarme hoy y leer la prensa, no puedo evitar hacerme algunas preguntas.

¿Por qué en Le Monde hablan de una "gigantesca" manifestación y en EL PAÍS  de 50.000 asistentes?

¿Por qué la noticia son los disturbios y no los motivos por los que la gente, desesperada e indignada, decide salir a la calle?

¿Por qué resulta tan peligroso para las mentes bien pensantes de este país, que la gente proteste por verse obligada a pagar los desmanes de una casta que se ha enriquecido a base de pelotazos y de especulación y que nos ha dejado en la ruina?

¿Por qué políticos y medios de comunicación alaban la valentía de los manifestantes ucranios y venezolanos y criminalizan y ridiculizan a los manifestantes españoles?

¿No es una provocación en sí misma blindar una ciudad (lo de ayer parecía Belfast en sus mejores tiempos) haciendo que los manifestantes nos sintamos como peligrosos antisistema según pisamos la calle?

¿No han sido los medios de comunicación y algunos políticos como ese ser vivo llamado Ignacio González (me niego a llamarle señor), los que han empezado a calentar el ambiente días antes de que se celebrara esta manifestación?

¿Qué hay de incomprensible en que la gente proteste al ver que las desigualdades sociales crecen sin parar y que en España haya cada vez más personas pasando hambre?

¿Tan difícil es ponerse en la piel de miles de parados que no encuentran una salida, de toda esa gente que ha perdido sus casas, de esos jóvenes que no tienen ningún futuro, de miles de personas que aún teniendo trabajo se sienten explotadas y ven como servicios públicos básicos y elementales están siendo literalmente arrasados?

¿De verdad que es tan difícil?

Y como me comen las pelusas y tengo que limpiar la casa aquí lo dejo.

Eso sí, he de decir que, aunque en ningún caso apoyo la violencia a pesar de ser una Antisistema-Radical de izquierdas-Neonazi-Comunista-Simpatizante de Amanecer Dorado-Estalinista-Fascista-Anti demócrata- Marxista- y puta (que es lo único que no me han llamado), prefiero pagar contenedores quemados y cajeros destrozados que una deuda ingente que no he contraído yo.
Al menos, me sale bastante más barato, y convendréis conmigo en que no está la cosa para dispendios...